Mi abuelo y el allá

Fesal Chain

Mi abuelo,
se sentaba en un viejo sillón
con sus ojos almendrados,
mirando el horizonte
inaprensible escurridizo,
él siempre decía "allá"
allá era todo para él,
eran su madre y su padre
sus hermanos y hermanas,
sus tíos y sus primos
y el pedazo de tierra a las orillas del Jordán,
eran sus vecinos, árabes o judíos
eran los olivos y la tierra seca
o el jardín de rosas y su aroma,
yo me sentaba a su lado
escuchando sus palabras,
mientras la familia escudriñaba
detrás de la puerta de la cocina,
el "viejo loco" que tomaba el Corán
entre su manos
y que le hablaba a un niño de siete años,
yo nunca pensé que estuviese loco
yo nunca lo observe extrañado
ni con risas en sordina,
yo lo acompañaba detenido
antes de su muerte,
con mis ojos hacia el mismo allá
que él con sus ojos almendrados
y sus labios tenuemente lilas añoraba,
desde su largo largo exilio
de la Palestina milenaria,
y de la Makka al-Mukarrama
hacia donde jamás pudo marchar
como el soldado del profeta que era,
mi abuelo,
mi querido abuelo,
triste en el viejo sillón
con sus ojos almendrados,
añorando un horizonte
un inaprensible y escurridizo allá
al que jamás pudo retornar.