La patria malherida

Fesal Chain
Publicado el 10 abril del 2015 especial para SITIOCERO

Es muy tarde ya. No puedo dormir. Y es que a pesar de que he sido una persona que en su vida ha realizado lo que ama y ha aprendido a no culpar al entorno por sus propios actos, es decir a no quejarme por las dificultades inherentes a mi condición de hombre de letras, no debo dejar de escribir esta carta. Quizás por lo mismo. Porque he tratado de ser un hombre libre. No soy un santo, a menos que se entienda que esos personajes han errado una y otra vez sus pasos y que en su momentánea ceguera no han visto al otro en su condición y humanidad. Pero bien, no lo soy en el sentido más común, de andar profetizando por los caminos una supuesta perfección.

Y por lo mismo entonces, estas palabras. Estoy angustiado. Estoy asqueado. Estoy perplejo pero no derrumbado, pero no ingenuo. La condición humana nunca me ha sido lejana, como para creer qué los demás no se caen, pues nada de lo que uno hace o deja de hacer es exclusividad de uno mismo. Pero estoy golpeado. Y no voy a decir que este escrito no tiene influencias, sí las tiene y que bueno que así sea. No somos tampoco inventores de la nueva vida, acaso meramente, buenos o malos cronistas de un pasado que en nuestro caso, no fue mejor...

Continue leyendo en SITIOCERO (enlace)




Entradas populares