Facundo


Fesal Chain

Y yo acá entre cuatro paredes de metal
mirando a los niños correr,
atendiendo a los vecinos
esos que creen que el alimento
sólo es un triste amasijo
de harina, sal y agua;
y yo aquí hermano con radio antigua
pegada al viejo oído izquierdo
que escucha poco,
mientras te acribillaban en Guatemala;
yo acá entre cuatro paredes
con estas ganas de salir corriendo muy lejos
con un poema tuyo enarbolado,
con estas ganas de que mis lágrimas
fuesen compartidas o acaso mi mirada vidriosa,
pensando que siempre fue mentira malparida
de que no fuiste de ninguna parte
o que no tenías porvenir, hermano;
pensando callado en mi kiosco
que tu canto me hace estar tirado en la arena,
o en bicicleta perseguir a Graciela
o como un niño boca arriba
mirando mi breve cielo en el trigal;
pensando tan apenado, que gracias a ti
me puedo mojar los pies en el mar azul
de mi libertad esquiva,
aún cuando está irremediablemente
a kilometros y kilómetros de distancia;
pensando en ti Facundo,
hermano
hermano
que nos hiciste sentir tan hondo,
que la felicidad temblorosa para nosotros,
los que creemos que el pan
es sólo un alimento más,
debe ser y será siempre
nuestro único y humilde
color de identidad.

Entradas populares