Mi país
x Fesal Chain
Cerrame el ventanal
que quema el sol
su lento caracol de sueño,
¿no ves que vengo de un país
que está de olvido, siempre gris,
tras el alcohol?...
La última curda, Catulo Castillo.
***
Mi país
mi país,
revuelve su mirada
y marchita sus pasos
por las calles derruidas
donde renguean los enfermos.
Donde el almacenero
y el vecino soñoliento de la plaza,
son los mismos
hombrecitos de siempre,
que han olvidado
borrar sus nombres
de las lápidas del mañana.
Mi país
mi país,
de niños viejos
que no se han ido nunca,
que no se han levantado nunca,
que sólo habitan y recuerdan
ese barrio
donde crecieron los abuelos.
Mi país
mi país,
de márgenes difusos
hechos de asfalto derretido,
de dura niebla flotando
y fantasmas al acecho.
Donde los muertos
resucitan una vez al año
y visitan las casas
de amigos y enemigos,
rogando y golpeteando
sobre corazones solitarios
que sollozan
y odios que no olvidan
y relinchan.
Mi país
mi país,
larga y estrecha
promesa incumplida,
en el que proletarios y burgueses
bailan rutinarios,
la cansada y triste danza
de la repetición perpetua.
Donde los rebeldes e insatisfechos
se desdoblan místicos
sobre sus propias figuras sin contorno,
y vuelan en un cielo inexistente.
Mi país
mi país,
donde los cines y las ferias
los circos y las tiendas
las conversaciones y los ojos,
parecen túneles sin tiempo
de oscurecidas palabras
apagadas,
bajo el gruñido y las muecas
de mujeres muy viejas
y jóvenes feroces.
Mi país
mi país,
no es el de ayer
ni el de mañana,
no hay bosques cárceles
ni mares fulgurantes
abiertos a la mirada abierta.
Mi país
mi país,
es tan sólo un amanecer
en que nos levantamos
apurados,
la tarde descompuesta
de fugas secretas y tareas
de manos duras y monedas,
una noche cansada
de puertas de fierro
cerrojos y cadenas.
Mi país,
mi país,
mi país,
mi país.